Realizamos este masaje sonoro con estos
instrumentos metálicos forjados de forma artesanal mediante una aleación de siete metales: plata, oro, mercurio, estaño, plomo, cobre y hierro. Se utilizan golpeándolos o frotándolos con una baqueta
y producen un sonido cargado de armónicos de naturaleza sonora.
Toda Terapia que utiliza el sonido como
herramienta, se basa en el principio de resonancia, por el cual una vibración más intensa y armónica contagia a otra más débil, disonante o
saludable. Otro factor de esta terapia son los armónicos. Cada vez que se produce un sonido aparecen los armónicos. Éstos tienen efectos altamente beneficiosos sobre nuestro cuerpo y sobre
nuestro campo energético.
Después de una sesión de masaje, el sonido de los cuencos tibetanos es un magnífico cierre de la terapia.
Tradicionalmente los cuencos tibetanos se
utilizaban y utilizan para la meditación y la sanación en los monasterios de monjes. Son el símbolo de lo incognoscible y como aleación datan de la época del budha histórico, Shakyamuni (560-480
AC).